Cinco estrellas familiar en Gran Canaria con acceso a tres playas
Si se mezclan el diseño nórdico, unas potentísimas vistas al mar y una luz natural increíble, el resultado se llama Radisson Blu Resort, Gran Canariat, un cinco estrellas perfecto para familias, situado en el suroeste de Gran Canaria, donde el lujo se vive pausadamente mientras se contempla el Océano Atlántico desde el jacuzzi del balcón de sus habitaciones ‘deluxe’. Con acceso directo a tres playas, tiene un magnífico solárium que rodea sus dos piscinas de agua dulce y salada, y mucha tranquilidad. Una auténtica ‘perla’ a la que regresar.
Vistas y cocina canaria en el restaurante 220°SW
La máxima menos es más se reproduce en todo el hotel sin que por ello se pierdan calidez y comodidad. Las habitaciones, diáfanas y en tonos neutros, solo se permiten alguna concesión al ‘navy’ en las junior suite, que incluyen hasta cocina completamente equipada. Difícil de mejorar, su restaurante 220º SW Bar & Grill (llamado así por la posición del sol al crepúsculo sobre el mar), ofrece platos con los mejores sabores locales, vistas asombrosas, −especialmente al atardecer, cuando está iluminado−, y lujo discreto.